La parroquia Nuestra Señora de la Paz, en Sto Tomé, ha experimentado tres robos

en menos de dos meses, incluyendo un incidente en el que el sacerdote fue agredido.

Los robos ocurrieron en la casa parroquial, con el último incidente coincidiendo con la ausencia del sacerdote, levantando sospechas sobre alguien que conocía sus movimientos. El Padre Marracino planea tomar medidas de seguridad, como la instalación de alarmas, cámaras y un tejido olímpico, debido a la preocupante inseguridad en la zona, afectada por robos y situaciones peligrosas, incluyendo tiroteos nocturnos. La crisis económica y las adicciones se mencionan como posibles factores contribuyentes a la situación.